De Regreso...

Ha pasado mucho tiempo desde que perdí contacto con todos los amigos que siguen este blog. Hubo cambios en mis proyectos que impidieron que contara con la tranquilidad necesaria para comunicarles mis pensamientos, aventuras y desventuras.
Dejé la capital de Chile para radicarme en otra ciudad a la cual debí comenzar a adaptarme, con todas las dificultades que conlleva una readecuación.
Luego vino el terremoto, que transtornó la vida de este país, largo y angosto, que aún no se sobrepone de este feroz embate de la naturaleza.
El violento sismo me sorprendió en Cancún, México, a donde había viajado lleno de ideas y ánimo. Debí regresar para atender las necesidades de mi familia, también damnificada por esta catástrofe natural.
La traumática experiencia me llevó a olvidar mis contraseñas, mis métodos de acceso a este blog, hasta que encontré nuevamente a un genio de la computación que cual Arquímedes, me despertó con su sabio ¡Eureka! y me hizo retomar la tarea impuesta hace algunos meses y así es como hoy, nuevamente estoy con ustedes.
Ha pasado mucha agua bajo los puentes, pero creo que siempre hay posibilidad de retomar el rumbo.
Deseo desde lo más profundo agradecer a mi genio salvador, el profesor Cristián Ahumada, quien en un mensaje solidario me expresó que:
"Ahora, más que nunca creo que existe un solo corazón para los que de verdad buscan a Di-s".
¡Gracias amigo por tu luz.